Terapias

Todos, en algún momento de nuestra vida, pasamos por momentos o situaciones difíciles que generan malestar psicológico (dudas, pesimismo, ansiedad, tristeza, ira, miedo, etc). En ocasiones la situación se alarga o estanca en el tiempo y los recursos de los que disponemos se agotan o se vuelven insufucientes.

La psicoterapia individual es un espacio de encuentro entre un psicólogo especializado y una persona que acude voluntariamente para solucionar o revisar aspectos de su vida personal.

A través de la comunicación que se establece entre ambos, se consigue un mayor conocimiento de sí mismo y la incorporación de nuevos recursos para afrontar, solucionar y gestionar de manera adecuada los problemas o situaciones conflictivas en las que se encuentra.

Los seres humanos somos seres relacionales, podemos comprendernos en relación con los demás, y el principal lugar donde aprendemos a hacerlo es en la familia.

En Terapia Familiar se trabaja con la familia porque es un lugar idóneo  para movilizar fuerzas y para conseguir que las personas que sufren puedan superar sus problemas.

Tratar de forma aislada a la persona que sufre un síntoma , sin tener en cuenta su entorno resulta a menudo infructuoso.

¿Cuál es la meta de la Terapia Familiar?

Al trabajar con toda la familia a la vez, la posibilidad de mejorar el síntoma presentado por uno se sus miembro es mayor porque se modifican antes  formas de comportamiento que mantienen y pueden empeorar el problema presentado.

Al mismo tiempo se logra mejorar la comunicación, y la relación entre todos los miembros de la familia. El resultado es satisfactorio para toda la familia entendiendo que todos han contribuido en la mejora del problema planteado.

¿En qué momento hay que plantearse la necesidad de recurrir a una Terapia Familiar?

Siempre que se hayan agotado los recursos propios de la familia y no se encuentre solución al problema a pesar de haberlo intentado.

Si no permitimos que se cronifique en el tiempo el problema solicitando ayuda a un profesional que oriente y establezca la intervención adecuada, lograremos que el problema no empeore y que la ayuda sea eficaz y rápida.

La terapia de grupo es un espacio psicoterapéutico en la que el terapeuta dinamiza a un grupo reducido de personas con problemáticas similares, para facilitar  que se ayuden individual y mutuamente.

En la terapia de grupo se comparten los problemas y dificultades de sus integrantes. Así, cada uno, no sólo aprende de sí mismo si no que actúa como “ayudante terapéutico” de los demás.

En ocasiones se indica la asistencia a un grupo terapéutico como parte imprescindible y complementaria a una  psicoterapia individual.

Beneficios de la terapia en grupo

• El apoyo del resto de los componentes del grupo y del terapeuta.
• La reducción del aislamiento a partir de la interacción con los miembros del grupo.
• Adquisición de herramientas útiles, al observar el beneficio que ha ocasionado otros.
• Aumentar el autoconocimiento a través de la identificación con los demás.

Tipos de grupos realizados en Te-Sis:

• Grupos de  apoyo en Adicciones
• Grupos de apoyo en Pérdidas

¿En qué consiste la terapia de pareja?

Es una estrategia terapéutica que tiene la finalidad de resolver conflictos que pueden surgir dentro de la relación.

El proceso de convivencia es complicado y se produce un desgaste como consecuencia no solo del día a día, sino por los cambios tanto  personales  como externos que se dan en la vida de cualquier pareja y que afectan a esa convivencia.

La terapia de pareja es un método eficaz para resolver estos conflictos que se producen en la convivencia.

Ofrece un espacio donde la pareja ensaya otra manera de relacionarse y comunicarse, donde pueden aprender a crecer juntos, reencontrarse, prevenir,  reparar heridas, resolver conflictos, llegar a acuerdos, tomar decisiones y ver la responsabilidad de cada uno en la dinámica de la relación.

¿Cuándo acudir a una terapia de pareja?

• Si tu relación de pareja está en crisis  y quieres que vuelva a funcionar y no os veis capaces de hacerlo solos a pesar de los intentos y buenas intenciones.
• Cuando las emociones negativas (desgaste, angustia, desánimo) provocan un distanciamiento afectivo y, además, frustración en diferentes áreas de vuestra vida, (comportamiento irritable con familiares y amigos) y  está afectando la educación de vuestros hijos.
• Ante cambios que han afectado y desestaiblizado  vuestra vida familiar: pérdidas, adolescencia o indeendeciade los hijos, conflictos con las familias políticas, etc.
• Si aparecen dificultades sexuales o pérdida del apetito sexual.
• Cuando la pareja quiere separarse sin odiarse. Especialmente cuando tienen hijos.

Cuando estos afectos se hacen muy frecuentes y se plantea la continuidad de la pareja es mejor consultar antes que las dificultades se cronifiquen en el tiempo.

Mi pareja no quiere acudir a terapia  ¿puedo ir solo/a?

Si uno de los miembros de la pareja no quiere acudir a terapia (hecho frecuente) el otro no debe dejar de acudir por ello. Se puede iniciar un primer contacto con la persona que hace la demanda al ser más consciente de las dificultades. Sabemos que cuando hay cambios en un miembro de la pareja aparecen cambios en el otro.

La terapia farmacológica es la prescripción de fármacos para aquellas situaciones en las que la intensidad y/o gravedad de los síntomas interfieren en la vida (personal, familiar, laboral, etc) de quien los padece.

Los tratamientos farmacológicos siempre se hacen bajo estricto control médico adaptando la dosis y la duración del tratamiento a las necesidades individuales de cada persona, a fin de minimizar riesgos y/o eliminar posibles efectos secundarios.

Realizamos análisis farmaco-genéticos para maximizar los beneficios desde el primer momento.

¿Cuándo es adecuado utilizar una terapia farmacológica?

• cuando se hace imprescindible para conseguir la abstinencia de un tóxico y ayudar en el mantenimiento posterior.
• cuando la intensidad o gravedad de los síntomas clínicos lo hacen necesario
• cuando detrminados síntomas psicológicos paralizan o impiden el proceso psicoterapéutico

Son pruebas objetivas (tests), validadas internacionalmente y que, a través de preguntas y ejercicios sencillos y estandarizados , ayudan a orientar o complementar un diagnóstico psicológico o psiquiátrico después de haber realizado una primera entrevista.

Exiten dos tipos principales de tests:

• Tests de  inteligencia y aptitudes: evalúan  capacidades personales de  tipo cognitivo ( memoria, atención,  aprendizaje, deterioro, etc).  También podemos conocer el Cociente Intelectual  (CI) de una persona o sus aptitudes académicas.
• Tests clínicos y de personalidad: evalúan características de personalidad, determinados estados emocionales, grado o nivel de intensidad con que se presenta un trastorno, etc